jueves, 19 de septiembre de 2013

EL ARMAGEDON FINANCIERO QUE SE AVECINA

EL ARMAGEDON FINANCIERO QUE SE AVECINA: UN ARMA DE DESTRUCCIÓN MASIVA OPERADO POR LOS BANCOS EN LAS SOMBRAS


Estimadas Amigas y Amigos,

Mientras en Chile celebramos las Fiestas Patrias, ayer 18 de septiembre la ex fiscal de distrito norteamericana, especialista en delitos económicos y financieros y actual Presidenta del “Public Banking Institute”, Ellen Brown, me ha hecho llegar el resultado de su último trabajo –parte del cual ya fuere publicado en The Huffington Post- el que revela las verdaderas Armas de Destrucción Masiva que los gigantes financieros usarán –en cualquier momento- contra las naciones con el objetivo de literalmente saquear sus bancos y destruir sus economías. Y ello se verá agravado por el hecho que ni el PIB de todas las naciones Mundo podrá respaldar, o cancelar, el descomunal “dinero flotante” que circula en la forma de los instrumentos financieros que seguidamente paso a detallar.  

En efecto, luego de la Crisis de 2008 –con la caída del Bear Stearns, Lehman Brother y AIG y la Crisis Subprime- el incremento en las regulaciones por parte de los gobiernos y las bajas tasas de interés han hecho que los préstamos hayan migrado desde el Sistema Bancario Comercial Regulado (SBR) hacia un Sistema Bancario en las Sombras (SBS) no regulado. Los Bancos en las Sombras, si bien están libres de la regulación de los gobiernos, están sostenidos por una garantía estatal oculta en la forma de Situación de Puerto Seguro (SPS) bajo la Ley de Reforma a la Quiebra de 2005 aprobada por Wall Street. El resultado ha sido la creación de un sistema perverso que llevará al Sistema Financiero Mundial hacia su autodestrucción.

Aunque han transcurrido cinco años desde que se produjese el colapso financiero gatillado por la quiebra del Lehman Brothers aquel 15 de septiembre de 2008, el pánico financiero ante el riesgo inminente de una nueva burbuja bursátil se ha incrementado, a pesar de la legislación Dodd-Frank diseñada para evitarla. Como lo revela un reciente artículo de Reuters, el riesgo no ha desaparecido sino que simplemente se ha movido hacia las sombras.

Se ha descubierto que los reales balances bancarios muestran que los bancos se están retirando desde los mercados de crédito tradicionales, cada vez con más y más riesgo, para dirigirse hacia prestamistas no regulados que comprende un volumen de “dinero” cercano a los US$ 60 trillones de dólares dentro del sector que recientemente se ha denominado los Bancos en las Sombras. El aumento de las regulaciones así como las bajas tasas de interés han hecho que los préstamos a dueñas de casa y pequeños empresarios se tornen menos atractivos que antes del año 2008. Los “chanchullos” que efectuaron los bancos con la crisis subprime ya no existe, pero en su reemplazo ha llegado el Sistema Bancario en las Sombras (SBS). El sector Bancario en las Sombras se nutre de muchas formas, aunque la mayor cantidad de dinero está en los denominados Repos y Derivatives. Pero, ¿qué son estos instrumentos financieros o Security?

Los “Derivatives” corresponden a un tipo de instrumento financiero (security) cuyo valor deriva de entidades subyacentes tales como un activo, un índice, o una tasa de interés; sin embargo, instrumentos que no poseen valor intrínseco en sí mismos. Entre las transacciones de “Derivatives” están los contratos financieros, que incluyen obligaciones de deuda estructuradas y depósitos, swaps, futuros, opciones, forwards (contratos a futuro) o combinaciones de todos ellos.

Por otro lado, los Repos, denominados Acuerdos de Recompra, RP o Acuerdos de Venta y Recompra, corresponden a la venta de un instrumento financiero (security) junto con un acuerdo para el vendedor de recomprar el instrumento en una fecha posterior. El precio de recompra será mayor que el precio de venta original, representando la diferencia el interés generado, a veces llamado “tasa de repo”. La parte que compra el instrumento financiero actúa propiamente como un prestamista, en tanto el vendedor original actúa como Prestatario (quien recibe el préstamo), utilizando el instrumento como colateral para un préstamo en dinero asegurado a la tasa de interés fijada. El Repo equivale a un “spot sale” combinado con un contrato a futuro (“forward”).

Ahora bien, se ha estimado que el valor hipotético del Mercado de los Derivatives asciende a US$ 1.2 cuatrillones de dólares, lo que corresponde a unas 20 veces el PIB combinado de todos los países del Mundo. Es decir, el PIB de todas las economías mundiales debería crecer en un 2000 % para que los gobiernos lograsen cancelar íntegramente las deudas respaldadas por documentos financieros acumulados tales como Repos y Derivatives.

Hervé Hannoun, Gerente del Banco para Convenios Internacionales, explica que tanto los bancos de inversión como los bancos comerciales pueden conducir sus negocios al Sistema Bancario en las Sombras (SBS), aunque ellos mismos no sean clasificados como instituciones del SBS. De esta manera precisamente las organizaciones bancarias reguladas serán los mayores bancos en las sombras.

GARANTÍAS ESTATALES OCULTAS APOYAN EL SBS

El economista holandés Enrico Perotti –dice la investigadora Ellen Brown- ha explicado que los bancos son capaces de consolidar sus préstamos a mucho menor precio que cualquier otra industria debido a que los bancos ofrecen “liquidez a la carta”. La promesa de que el inversionista puede obtener su dinero en cualquier momento se hace creíble debido a Garantía Estatal a los Depósitos y al acceso que poseen los bancos a los fondos del Banco Central.

Más, ¿qué garantía apoya a un Banco en las Sombras? ¿Por qué una institución financiera estaría confiada de prestar barato en un Mercado en las Sombras, cuando aquel no está ni protegido por una Garantía a los Depósitos ni por los Rescates Gubernamentales?

Perotti responde que aquella “liquidez a la carta” está garantizada en el SBS mediante una garantía gubernamental poco conocida: la denominada situación de “Puerto Seguro” en una Quiebra. Los Repos y Derivatives –que son los valores o acciones de los bancos en las sombras- poseen “superprioridad” por sobre cualquier otro derecho.

Perotti ha escrito: “Este tipo de instrumentos garantizan el acceso a fondos baratos gracias a la expansión sostenida – en la Comunidad Europea y en USA- de la Situación de Puerto Seguro (SPS). También denominado Privilegio de Quiebra, se garantiza al prestamista –asegurado por medio del contrato colateral- el acceso inmediato al dinero por medio de aquellos instrumentos asegurados. La SPS garantiza el privilegio de ser excluido de las restricciones de orden y jerarquía que establecen los Protocolos y Procedimientos que se aplican para el resto de los Security. Los Préstamos en Puerto Seguro –donde en la actualidad se incluyen márgenes de Repos y Derivatives- pueden de inmediato ser revendidos y reposicionados mediante sus contratos colaterales. Ello le otorga una extremada “superprioridad” a estos instrumentos por sobre cualquier otro, incluyendo impuestos, depósitos, créditos reales asegurados y valores garantizados. En otras palabras, se le asegura la liquidez inmediata a los poseedores de dichos instrumentos, aunque desafortunadamente, se hace aqullo socavando el orden en que debiera llevarse a cabo la liquidación”.   

Cuando se adultera el orden de la liquidación, existe una premura por obtener el contrato colateral, lo cual puede ahora impulsar al deudor a realizar la quiebra de la empresa.

La Enmienda de 2005 sobre la Ley de Reforma a la Quiebra que fue creada para favorecer el status de los Repos y Derivatives fue aprobada mediante un lobby realizado por los banqueros para que no se efectuasen demasiadas preguntas. De esta forma se ha creado el denominado Plan B, que no es otra cosa que una efectiva herramienta legal para robar a las naciones y a sus bancos. David Malone ha escrito: “Esta enmienda que fue descrita como necesaria para reducir el riesgo sistémico en una quiebra financiera… permite el uso de un amplio rango de activos aún más riesgosos… El tamaño del mercado de los Repos fuertemente incrementado y con activos aún más riesgosos ha sido aceptado como un problema colateral para que los Operadores de Mercado, al ver que la persona a la que le han prestado pretende darse a la quiebra, busquen obtener su dinero de vuelta antes que ningún otro y para que nadie pueda detenerlos”.

QUEMAR LOS GRANEROS PARA OBTENER EL DINERO DEL SEGURO

La Situación de Puerto Seguro (SPS) crea la suerte de un perverso incentivo que transforma a los Derivatives en reales “armas financieras de destrucción masiva”, tal como Warren Buffett las ha denominado. Ello equivale a quemar el granero para obtener el dinero del seguro.

En efecto, cualquier otro inversionista –como un poseedor de bonos- arriesga el perder parte de su dinero en una quiebra, de modo que posee buenas razones para buscar la manera de impedir la quiebra de su socio de mercado. Más, ello no sucede con los socios con los que han suscrito Repos y Derivatives. Los inversionistas estarán mejor servidos por medio del saqueo de la compañía –perfectamente legal- tan pronto como los problemas en las empresas parezcan avecinarse. De hecho, el mercado de los Repos y Derivatives podría empujar a un banco a la quiebra (si el banco posee el dinero de dichos instrumentos) cuando aquella resulte más adecuada para los inversionistas. Ello podría suceder, por ejemplo, cuando los mismos inversionistas se vieran en la necesidad de obtener un poco de dinero para sí mismos con el objetivo de poder cumplir con algunos de sus propios acreedores más apremiantes.

Ello es tan cierto que el colapso de Bear Stearns, Lehman Brothers y AIG se debió a que los socios dueños de los Repos y Derivatives que estaban en aquellas instituciones súbitamente detuvieron su mercado y a su vez decidieron “saquear” dichas entidades. Como se demuestra, el colapso de los créditos globales no fue gatillado por los préstamos subprime en sí sino por la premura por obtener los contratos colaterales y hacerse de los fondos –aprobados con la ayuda del Congreso Norteamericano- por medio de la Situación de Puerto Seguro que se garantiza a los instrumentos Repos y Derivatives.

Bear Stearns y Lehman Brothers fueron estrictamente bancos de inversión, más ahora tenemos gigantescos bancos depositarios de instrumentos financieros con Derivatives. Con la derogación de la Ley Glass-Steagall que separaba a los bancos en depositarios y de inversión, ahora todo aparece mezclado entre depósitos e inversiones. Y así, el riesgo para los depositantes se tornó patente cuando en octubre de 2011 el Man Financial Global se declaró en quiebra. Cuando el MF Global se derrumbó lo hizo principalmente porque sus socios poseedores de Repos y Derivatives ejecutaron tal decisión. Y al actuar así también saquearon la compañía. Y debido a la mezcla entre los dineros de los clientes y las deudas hipotecarias los “saqueadores” se hicieron también de los dineros de los depositantes… Se sabe hoy que el JP Morgan posee el dinero que era de MF Global mientras los abogados de las personas y víctimas restantes continúan litigando sobre ello.

Luego del colapso de MG Global siguió el rescate de Chipre mediante la confiscación de los dineros de los depositantes con la finalidad de recapitalizar los fenecidos bancos de aquella nación. De ahí siguieron los rescates aparentemente coordinados en todo el Mundo, ejecutado por la Oficina de Estabilidad Financiera, que es la entidad financiera reguladora con sede en Suiza.

AUTODESTRUCCIÓN DE LOS MECANISMOS DE SEGURIDAD DEL SISTEMA BANCARIO

Antes de proseguir con la exposición es importante tener en cuenta las siguientes definiciones. El “bail-in” es un mecanismo de rescate donde las pérdidas las asumen los acreedores, accionistas, bonistas y depositantes; en tanto que el “bail-out” es un modelo de rescate financiero en que las pérdidas las asume el Estado junto con todos los ciudadanos y contribuyentes, por medio de los impuestos (algo similar a lo que en Chile sucedió con la llamada Deuda Subordinada).

Las políticas de rescate, denominadas “bail-in”, han sido necesarias por el hecho que los gobiernos intentan obstaculizar futuros rescates estatales con fondos públicos (denominados “bail-out”) para ayudar a bancos en problemas. En Estados Unidos, la Sección 716 de la Ley Dodd-Frank prohíbe los rescates efectuados por los contribuyentes en la mayoría de las actividades especulativas. Ello significa que la próxima vez que se avizore un evento estilo Lehman, el sistema bancario podrá simplemente colapsar dentro de un agujero negro de respectivos saqueos.

Las leyes de quiebra permiten ahora que los bancos se despedacen entre sí. El más fuerte le presta al más débil y lo saquean cuando se aproxima el momento de crisis. El plan le permite al banco más grande –que ha obtenido grandes participaciones en bonos poco fiables de la zona del Euro- quedar fuera de la crisis de los bonos y de este modo beneficiarse de una quiebra que de otro modo lo hubiese “matado”. Por tanto la clave es la siguiente: todo lo que se requiere es conocer lo importante de la Ley de Quiebra y hacer un mercado de Repos, Hipotecas y Derivatives con los bancos más pequeños tanto como sea posible. La investigadora Ellen Brown cree que con ello, los bancos más grandes han construido y ampliado un enorme cable de autodestrucción del sistema bancario mundial.

Los bancos más débiles serán las víctimas, y con ello las naciones donde dichos bancos se encuentren, pero seremos nosotros –las personas y los ciudadanos- quienes soportaremos el peso de toda esta carga.

La investigadora Ellen Brown se pregunta: en los últimos cuatro años, ¿quiénes han colocado dinero en los bancos? ¿Y quiénes han llegado a ser los mayores tenedores de bonos de todo el Mundo?. Somos nosotros, las personas. Así las cosas, primero, por medio de los bancos nacionales y ahora por medio de la FED, el Banco Central Europeo (ECB) y varios contribuyentes se está financiando el rescate (bail-out) de los fondos, de modo que los tenedores de bonos serán las próximas víctimas del saqueo previsto en el Plan B. Al final, las personas realizarán largas filas esperando por un dinero del cual los saqueadores ya se habrán apropiado.

Lamentablemente, en ningún país existe manera de regular esta suerte de riesgo inminente.

CONCLUSIÓN

Los bancos han creado un Armagedón de máquina de robo financiero, una real arma de destrucción masiva. Y de esta manera, el denominado Plan B no es más que un mecanismo legal para poder robar no sólo a los bancos más vulnerables de las naciones más débiles, sino que el objetivo es robar a las naciones mismas. Y dicho saqueo no tomará ya meses –como en el pasado-, ni siquiera días. Dicho robo programado sucederá en horas, si no en minutos.

1 comentario:

  1. Durante la época feudal en Japón se especulaba con 110 mil sacos de arroz, siendo que en todo Japón sólo existían 30 mil sacos de arroz. Hoy la diferencia entre "riqueza teórica" v/s "productos tangibles" es de unas mil veces o más.
    Está claro: el gigante tiene pies de barros.
    Pocos comprenden que el dinero circulante es sólo deuda.

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